Marzo... ¿No os parece casi mágica esta palabra? Cinco letras que huelen a primavera, a colores suaves, a tardes que se alargan. Cinco letras que consiguen cambiarme el chip de manera radical... Y tanto es así que, aún con viento (y frío, para qué engañarnos), soy capaz de plantarme un top de tirantes, un trench fluido y quedarme tan a gusto. Y es que en esta época ocurre un poco como en otoño: abrigos y sandalias y botas y tirantes se mezclan y conviven en perfecta armonía ofreciéndonos combinaciones en ocasiones un poco disparatadas pero, sin duda alguna, originales como pocas, ¿no os parece?
Comienza marzo. Bye bye invierno.
Comienza marzo. Bye bye invierno.
No hay comentarios:
Publicar un comentario