Se que corro el riesgo de que acabéis aborreciendo estos pantalones, o el rosa, o las dos cosas a la vez, pero a mi me encantan ambas y claro, si a eso le sumamos que son super cómodos, ligeros y fresquitos y que yo llevo todo el fin de semana "más pa´allá que pa´acá" (algún virus que no deja que levante cabeza) pues son la alternativa perfecta cuando pretendo ir arreglada pero no tengo ninguna gana de pensar...
Del maxichaleco confesaros que lleva desde el mes de marzo (quizás antes) en mi armario pero que, por unas cosas o por otras, no había estrenado aún. Todo un delito si tenemos en cuenta lo bien que sienta y lo preciosísimo que es, ¿no os parece?
Espero, como siempre, que os guste. Que tengáis una feliz semana (al menos mejor que la mía) y nos vemos el próximo jueves.
¡Muack! ¡Muack! ¡Muack!
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