Un look perfecto para uno de esos días en los que no sé qué ponerme - que son muchos, la verdad sea dicha. Porque sí, porque siempre que me planto en jarras frente al armario sin saber a qué parte meterle mano, con una pereza espantosa ante la idea de desprenderme de mi pijama calentito y con la cama tentándome para que dé media vuelta, acabo tirando de la biker y las zapatillas. De hecho Jose, que me conoce a la perfección, lo primero que me suelta al verme es: "hoy no tenías ganas, ¿eh?". "Pues no, ninguna..." Jajajaja.
Espero, como siempre, que os guste y que, como a mí, pueda serviros como opción para esos días en los que el despertador no debería sonar...
Muchísimos besos y feliz fin de semana.
¡Muack!
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